Guía Episodios

Introducción

Acto 1

Acto 2

Acto 3

Acto 4


Producción #V908 - Episodio 08


GUÓN
Susanne Beck


DIRECCIÓN
Denise Byrd


PRODUCCIÓN
Carol Stephens

SCREENGRABS
Judi Mair


GRÁFICOS
Lucia


TÍTULO EPISODIO GRÁFICO
Calli

TRADUCCIÓN
XENACENTRO


INTRODUCCIÓN

 

ABRE DE NEGRO:

 

EXT. BOSQUE  - AL ATARDECER

 

Un joven cabalga lentamente a través de la espesura alzando el cuello y entornando los ojos  intentando encontrar el rastro  de su objetivo antes de que la oscuridad le obligue a retrasar su entrega hasta la mañana. Eso le crearía problemas con su jefe y precisamente eso es lo que no le gustaría. Es su tercer trabajo en muchas lunas y, si no lo puede conservar, seguro que su nueva esposa volverá con sus padres.

 

Va vestido todo de marrón: camisa marrón, unos raros pantalones marrones hasta la rodilla, calcetines marrones que asoman de sus cortas botas marrones y una capa marrón sobre su cabeza. Su caballo tiene casi la misma tonalidad de color, igualmente que la voluminosa alforja que porta, excepto por una insignia dorada con las letras "USS".

 

Cuando el estrecho camino que recorre se ensancha de repente en un pequeño claro, hace parar a su cansado caballo y saca una pequeña placa de madera del bolsillo de su camisa.

 

 

HOMBRE

(bajito)

Buen sitio para acampar. Comprobémoslo.

(pausa)

Dos personas, creo. Al menos hay dos

esterillas para dormir.

(pausa)

Un caballo amarillo. Perfecto.

 

Asintiendo con satisfacción, baja del caballo y saca un pergamino de la alforja. El campamento está vacío, pero el aspecto de la carne asándose lentamente en las alegres llamas del fuego, indica que sus ocupantes están cerca.

 

Más cerca de lo que pensaba, ya que es sorprendido por la súbita aparición de una alta y hermosa mujer, medio vestida , que sostiene un disco afilado como una hoja de afeitar contra su garganta. Traga con fuerza y la hoja le realiza  un afeitado que no había solicitado.

 

La mujer se le queda mirando con los ojos entornados, azules como el acero.

 

 

Traga de nuevo. Con fuerza.

 

HOMBRE

(continúa)

Mmm... ¿Entrega?

 

La mujer sigue mirándole fijamente como si hablase en una lengua distinta del griego.

 

Con extrema lentitud, el hombre levanta el pergamino y mira detenidamente el nombre escrito en la etiqueta.

 

HOMBRE

(continúa)

Para la señorita... Mmm...

Bardo. Guerrera.

 

Se detiene.

 

HOMBRE

(continúa)

¿Eres tú?

 

 

Durante un segundo, sólo un segundo, imagina ver un destello de burla en esos llamativos ojos, pero lo cree fruto de su aterrorizada e hiperactiva imaginación cuando la mirada fija vuelve a su anterior impenetrabilidad.

 

HOMBRE

Si no lo eres... ¿po...podrías

decirme dónde encontrarla?

 

Esta vez está seguro de que puede sentirlo... Una leve disminución de la intensa presión sobre su garganta. Poco después, una joven rubia aparece, vestida tan sólo con una pequeña toalla que apenas la cubre. Al verla  su temperatura sube como para competir con el fuego.

 

Su captora percibe esa reacción. Torna los labios en lo que podría aventurar a llamar sonrisa. Si estuviera borracho. Y senil.

 

XENA

(canturreando)

Oh, Gabrielle. Aquí hay

alguien que quiere verte.

 

Gabrielle ve a Xena y a su invitado, y les ofrece una alegre sonrisa. Se acerca, obviando, al parecer, el efecto que causa sobre el joven.

 

GABRIELLE

Hola. ¿Puedo ayudarte?

 

 

 

HOMBRE

(con voz chillona)

¿Eres...?

 

Se aclara la garganta y lo intenta de nuevo.

 

HOMBRE

(continúa)

¿Eres e...?

 

Mira la etiqueta de nuevo.

 

HOMBRE

(continúa)

¿la bardo, guerrera?

 

Gabrielle mira fijamente a Xena e intercambian una mirada divertida.

 

GABRIELLE

(al hombre)

Algunos me llaman así.

 

XENA

¡Eh!

 

Gabrielle sonríe con satisfacción.

 

GABRIELLE

Soy Gabrielle. ¿Puedo ayudarte?

 

El joven parpadea atemorizado por su presencia.

 

HOMBRE

Ee... ¡sí! Traigo este pergamino

para ti. Envío especial.

 

Sus manos se rozan al entregárselo y el mensajero cree que se va a desmayar, pero se lo piensa mejor cuando ella le regala otra hermosa sonrisa, esta vez de agradecimiento.

 

Oye algo sospechoso parecido a un gruñido a su derecha y, asustado, mira en esa dirección. Sólo para encontrarse con los ojos de Xena que amenazan con incinerarlo en el acto.

 

HOMBRE

¡Oh!... Mm... Si simplemente

pudiera firmarme esto, señora, para

probar que lo ha recibido, yo...ya sabe...

seguiría inmediatamente mi camino.

 

Gabrielle agarra la tablilla que le ofrece y la pluma; escribe su nombre con una rúbrica y se los devuelve.

 

GABRIELLE

Gracias de nuevo y ten cuidado si en el camino

a casa se te hace de noche, ¿vale?

 

Gabrielle se vuelve.

 

GABRIELLE

(continúa)

Da a este hombre una

propina, ¿quieres, Xena?

 

El joven mira a Xena expectante.

 

XENA

(gruñendo)

No he traído ningún dinar.

 

 

 

La mirada que recibe lo manda de vuelta a su caballo y se aleja cabalgando en una nube de polvo, demasiado rápido y asustado como para oír las carcajadas a su espalda.

 

FUNDIDO A NEGRO.

 

FIN DE LA INTRODUCCIÓN

ACTO UNO